Ante los graves daños que dejaron las fuertes lluvias el pasado viernes en la delegación Gustavo A. Madero, es necesario que las 16 jefaturas delegacionales etiqueten recursos en su programa operativo anual del 2010, para la construcción de pozos de absorción que eviten inundaciones y al mismo tiempo puedan ahorrar agua.
El exdelegado de Iztapalapa, ahora diputado del PRD en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Horacio Martínez, recordó que hace dos semanas presentó ante el pleno un exhorto para que las delegaciones políticas etiqueten recursos y construyan pozos de absorción, con el fin de que el agua pueda infiltrarse al subsuelo, evite inundaciones y ayude a los capitalinos a ahorrar agua.
Comentó que hace unos años en la parte baja de la Sierra de Santa Catarina ocurrían severas inundaciones, sin embargo se realizó la construcción de pozos de absorción y las familias que ahí habitan ya se encuentran más seguras.
Martínez Meza informó que tan sólo en Iztapalapa, del año 2000 a la fecha se han construido 170 pozos de absorción y para este año se tiene contemplado la construcción de 10 más, que posibilitan absorber 300 litros por segundo de agua de lluvia cuando están recién perforados y en el caso de Coyoacán se han construido 26 de características similares, por lo que Gustavo A. Madero requerirá una inversión al menos 50 millones de pesos para la construcción de 20 pozos de absorción.
El diputado local agregó que debido al crecimiento de la población las extracciones al acuífero se han incrementado lo que trae consigo también que la recarga natural de los mismos disminuya y genere una sobreexplotación en algunos acuíferos de hasta 130%; adicionalmente a esto la sobreexplotación ha hecho necesario que en algunas zonas de la ciudad se instalen plantas a pie de pozo para aplicar un tratamiento potabilizador al agua extraída para que sea apta para el consumo humano.
La sobreexplotación de los mantos acuíferos en la ciudad se traduce en proporciones de 4 a 1 en función del agua infiltrada, lo cual ha ocasionado hundimientos severos en algunas zonas de la ciudad y en especial al oriente de la misma.
Debido a lo anterior, dijo que es necesario cambiar el modelo de suministro de agua potable para la ciudad, construyendo pozos de absorción, los cuales posibilitan mitigar un poco las consecuencias negativas de la sobreexplotación de los mantos y permiten la utilización del agua de lluvia infiltrándola al subsuelo para recarga de los mismos.
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