miércoles, 3 de marzo de 2010

licenciado Felipe Calderón Hinojosa, durante la Entrega de la Obra de Recuperación de Arenales


Palabras del Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Felipe Calderón Hinojosa, durante la Entrega de la Obra de Recuperación de Arenales en el Litoral de Benito Juárez y Solidaridad, que tuvo lugar en este municipio.

Qué tal, amigas y amigos quintanarroenses. Muy buenas tardes. Muy buenos días, todavía.

Señor licenciado Félix Arturo González Canto, Gobernador del Estado de Quintana Roo. Muchas gracias por sus palabras, por su hospitalidad.

Señor Diputado Luis Alberto González Flores, Presidente del Congreso del Estado.

Magistrada Lizbeth Loy Song Encalada, Presidenta del Consejo de la Judicatura y del Poder Judicial del Estado.

Ingeniero Gregorio Sánchez Martínez, Presidente Municipal de Benito Juárez.

Señor Román Quian Alcocer, Presidente Municipal de Solidaridad.

General Anastacio García Rodríguez, Comandante de la XXXIV Zona Militar.

Vicealmirante Carlos Octavio Angulo Jiménez, Comandante de la V Región Naval.

Muy apreciables legisladores quintanarroenses aquí presentes.

Secretarios.

Distinguidos miembros del presídium.

Distinguidos invitados especiales.

Empresarios.

Amigas y amigos.

Tengo la plena convicción de que el turismo es una fuente de empleo y bienestar, y por eso es una prioridad del Gobierno Federal; y que, además, México tiene sitios privilegiados en el mundo por su belleza natural y que, al mismo tiempo, son, deben ser, una fuente permanente de crecimiento económico y de empleo.

Por eso me da muchísimo gusto hoy, finalmente, estar con ustedes en la Entrega de las Obras de Recuperación de los Arenales de Cancún y Playa del Carmen. Una obra largamente esperada.

Yo recuerdo haber tenido contacto, la primera vez, con los quintanarroenses, con los gobiernos y con los empresarios, entonces, cuando fui Director de BANOBRAS.

Y, entonces, efectivamente, nos propusimos hacer una obra de largo plazo, una obra que fuera sustentable financieramente, sustentable ambientalmente y que estimamos que a través del ingreso esperado del cobro de derechos federales de playa de la zona marítima, de la zona de playa, pudiéramos financiar a través del Banco la recuperación de las playas, fundamentalmente de Cancún.

Pasó el tiempo y, efectivamente, ya no estaba yo en Banobras, pero los estudios ahí realizados sirvieron de base para el primer esfuerzo que se haría precisamente a fines del 2005, principios del 2006.

El esfuerzo fue insuficiente, lo sabemos, útil, pero insuficiente y, tiempo después, enfrentamos nuevamente el efecto devastador, es la palabra, de fenómenos naturales que han azotado a esta Península, y en particular a estos destinos turísticos.

La erosión, la pérdida de arena, de playa, siguió afectando y definitivamente canceló, aparentaba haber cancelado ya algunas zonas de Cancún o de Playa del Carmen como destinos de playa privilegiados.

Hoy, ustedes pueden contemplar y ojalá lo podamos hacer verdaderamente todos, cómo ha cambiado esta realidad después del esfuerzo conjunto que hoy estamos concluyendo con esta inauguración y esta entrega formal de tan singular esfuerzo.

Yo quiero, desde luego, reconocer el esfuerzo de todos los trabajadores que participaron en estas obras de recuperación. Gracias al compromiso y dedicación de todos, Cancún y Playa del Carmen cuentan ahora con nuevas y hermosas playas que serán el disfrute, el gozo de cientos de miles, estoy seguro, de visitantes de México y de todo el mundo y, al mismo tiempo, la fuente de ingreso también de miles y miles de familias quintanarroenses.

Cancún y Playa del Carmen brillan sin duda como dos de los principales destinos turísticos de nuestro país. Cada año, cientos de miles de visitantes de México y del mundo se maravillan con la belleza de las playas de estos centros vacacionales, que son verdaderamente de primer nivel.

Cuando pasó el huracán Wilma, en el 2005, afectó prácticamente el 90 por ciento de las playas de la zona. Es asombroso, como se nos mencionaba, que a raíz de esos huracanes las playas a mis espaldas perdieron, prácticamente, el 90 por ciento de la arena que regularmente tenían.

Esto, evidentemente, tuvo una influencia, un impacto determinante en la imagen de este destino turístico, que vio cómo se reducían y se cancelaban viajes de visitantes, tanto nacionales como extranjeros.

Cancún, Playa del Carmen, Quintana Roo, en general, tiene una importancia estratégica para el turismo y, en consecuencia, una importancia estratégica para mi Gobierno; y, por tanto, en consecuencia, le hemos asignado a su recuperación la más alta prioridad.

Por eso, decidimos impulsar una solución integral, más de mil millones de pesos, para recuperar 14 kilómetros de playas que habían resultado afectadas.

Para la fijación de esta arena, que tiene características como la que se perdió tanto en Cancún, como en Playa del Carmen, se construyeron estructuras de apoyo que ayudan a asegurar un ancho de playa de 30 a 40 metros, y que incluso ahora hay partes que tienen más de 100 metros de amplitud.

Sabemos que por un proceso natural el flujo del mar irá erosionando, pero las estructuras de apoyo que se han establecido buscan garantizar, precisamente, un ancho de playa de entre 30 y 40 metros.

Esto permitirá, estoy seguro, reconstituir la imagen que tenían estos centros vacacionales antes de los desastres naturales que tanto han impactado a la región.

Recuperar las playas significa recuperar el turismo. Más turismo, significa más recursos, más inversión, más empleos y, sobre todo, mayor bienestar para la gente de Quintana Roo y de México.

Esa es la verdadera dimensión, el verdadero significado de esta obra de magnitud sin precedente.

Para su realización, el Gobierno Federal aportó 400 millones de pesos. Y estoy convencido de que ha sido una gran inversión, porque al recuperar las playas recuperamos el principal atractivo de Cancún y de la Riviera Maya; ha contribuido también al financiamiento de segmentos de recuperación de los recursos que requiere el propio Fideicomiso.

La recuperación de las playas de Cancún y de Playa del Carmen son una muestra fehaciente de que el Gobierno Federal tiene al turismo como una clara prioridad, que ha invertido de manera determinante y, sobre todo, ha impulsado el proyecto por encima de las innumerables resistencias que se presentaron para su realización.

Quiero subrayar que las obras se realizaron con base en la orientación de los expertos: expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México, del Instituto Politécnico Nacional, del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua, de la Comisión Federal de Electricidad y de la Comisión Nacional del Agua.

Estas instituciones, junto con la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, realizaron rigurosos estudios de ingeniería e impacto ambiental, a fin de asegurar que la recuperación de las playas se hiciera de manera sustentable.

Todas las medidas de mitigación ambiental; por ejemplo, el rescate y reubicación de la fauna marina proveniente de los bancos de arena utilizados, el repoblamiento de caracol rosado, el monitoreo de la fauna costera, de las corrientes marinas y otros, se están atendiendo de manera puntual.

Me consta, porque he dado un seguimiento personal a este proyecto, que buzos, expertos y científicos recogieron caracol por caracol, literalmente, en el banco de arena utilizado para poder recuperar las playas; proveyeron a su manutención y cuidado, y rehabilitaron plenamente el ecosistema, que de esta manera no resultó afectado en lo absoluto.

Las playas que hoy entregamos cumplen todas las disposiciones que exige la legislación ambiental y constituyen la propuesta más viable para la recuperación y el mantenimiento de los arenales en estas costas de Quintana Roo.

Hoy, Cancún y Playa del Carmen ofrecen a sus visitantes playas, prácticamente renovadas, construidas con absoluto respeto al medio ambiente y que, puedo asegurar, son de las playas más bellas del mundo.

El Gobierno Federal contribuye así a preservar la belleza de Cancún, patrimonio de México y los mexicanos, pero, sobre todo, contribuye a preservar las fuentes de empleo primordiales de las que viven cientos de miles de familias quintanarroenses.

La renovación de las playas no es un hecho aislado. Se inscribe en un marco de la estrategia del Gobierno Federal para impulsar la reactivación turística del país.

Como todos sabemos, este sector se vio muy afectado durante el 2009, no sólo por la crisis económica, que afectó de manera dramática el poder adquisitivo de los principales visitantes internacionales y nacionales de estos destinos turísticos, medularmente de los visitantes, los turistas de Estados Unidos y Canadá, sino también como consecuencia del impacto que tuvo el surgimiento del brote de Influenza A/H1N1.

Recuerdo que en aquellos días de abril se produjeron cancelaciones en cadena en todo el país, y particularmente afectaron este destino turístico, que vio considerablemente mermado su nivel de visitantes.

El Gobierno Federal no ha dejado de trabajar día tras día, y con codo con codo con el sector empresarial y turístico del país. Y gracias a la suma de esfuerzos entre trabajadores, empresas y autoridades, hoy la industria turística está claramente en un camino de recuperación.

Hemos hecho un esfuerzo de promoción turística sin precedentes a través de la campaña Vive México. Hemos realizado obras, como las que hoy inauguramos, de recuperación natural de destinos turísticos. Hemos sido especialmente enfáticos en la promoción del país.

Hemos orientado, también, conseguido, primero, y orientado, después, la realización de un gran número de foros internacionales para realizarse en los lugares más afectados, no sólo para recuperar la imagen de México, sino también para beneficiar con su realización la economía local.

Por esa razón, el Gobierno Federal impulsó este año la realización aquí, en la Riviera Maya y en Cancún, de foros de los más destacados en el mundo, como fue la Cumbre de América Latina y el Caribe, la Asamblea Internacional del Banco Interamericano de Desarrollo, la Cumbre Mundial de Energía, que también se desarrollará en estas tierras, y finalmente la Conferencia de las Partes 16 sobre Cambio Climático de las Naciones Unidas.

Cuatro grandes eventos que pondrán a Cancún y a la Riviera Maya en el ojo del mundo y no sólo generarán actividad económica y empleo durante su realización, sino que además impactarán positivamente la recuperación de la imagen de nuestro país en todo el mundo.

Este esfuerzo, esta serie de esfuerzos que he relatado, nos han permitido ir recuperando la presencia del turismo en estas playas. Por ejemplo, la ocupación hotelera, que llegó a 24 por ciento en abril, en mayo, en diciembre pasado ya alcanzó niveles del 60 por ciento. Pero lo mejor es que hace algunos días, precisamente durante la realización de la Cumbre de Río, la Cumbre de América Latina y el Caribe aquí, en Quintana Roo, los niveles de ocupación turística rebasaron el 90 por ciento, 93 por ciento para ser exactos. Con lo cual, estuvieron por encima de los niveles históricos registrados en el año 2008.

Otro dato positivo es la entrada de turistas internacionales. Esta vez los datos a diciembre son así: En el peor momento del año pasado arribaron a Cancún 82 mil turistas internacionales; en diciembre, tan sólo, llegaron ya 212 mil turistas internacionales.

El dato de llegadas de turistas internacionales para todo el estado mostró un incremento de 130 por ciento, al pasar de 157 mil a 340 mil turistas internacionales, para el Estado de Quintana Roo.

Para consolidar esta recuperación, el Gobierno Federal ha actuado y seguirá actuando en diversos frentes.

Primero. A través de un esfuerzo histórico en infraestructura, para hacer más cómodos y más accesibles los centros turísticos. Estamos avanzando, por ejemplo, en la construcción de dos nuevos aeropuertos. Hemos ampliado 26 ya. Se ha concluido la ampliación del aeropuerto de Cancún, que ahora tiene una nueva pista. Es el primero del país; uno de los pocos de América Latina, con capacidad de hacer operaciones simultáneas, y recientemente ha sido catalogado, en su operación, como el mejor de América Latina. En breve, también, esperamos poder impulsar la convocatoria para la construcción de un nuevo aeropuerto en la Riviera Maya.

En segundo lugar. Estamos conectando los destinos turísticos para diversificar su oferta.

Estamos invirtiendo, por ejemplo, en toda la infraestructura de la zona, con obras como la modernización de la carretera Tulum-Cobá, una inversión de 150 millones de pesos del Gobierno Federal; la ampliación de la carretera Cafetal-Tulum-Playa del Carmen, que tiene un avance del 80 por ciento y que representa una inversión Federal de dos mil 500 millones de pesos, y que son vías que van a conectar los tradicionales destinos de playa con zonas arqueológicas vitales, no sólo para la cultura, sino para el turismo, como Chichén Itzá y Cobá misma.

En tercer lugar. Estamos impulsando más proyectos turísticos en todo el país. El desarrollo del primer Centro Integralmente Planeado, después de décadas, que será el Centro Integralmente Planeado del Sur de Sinaloa; el completar el proyecto también largamente, si no pospuesto, retardado en su realización, de Litibú, que estamos a punto de completar, y otras más, hablan del compromiso del Gobierno Federal con el turismo en el país.

Queremos más turismo en Quintana Roo. Queremos más empleo y más bienestar para las familias. Sepan ustedes, amigas y amigos, que tienen el compromiso y el apoyo del Presidente para impulsar el desarrollo de este gran estado.

En este Año de la Patria, en que celebramos 200 años de ser orgullosamente libres, orgullosamente mexicanos, uno de los motivos para sentirnos orgullosos, es tener este gran país, que es México.

Sus inigualables bellezas naturales, como lo es, desde luego, las playas de Cancún y de Playa del Carmen, que le han dado renombre internacional a nuestro querido México.

Por eso, amigas y amigos, yo quiero invitarles a poner todo de nuestra parte, todos, para conservar la belleza de las playas renovadas para disfrute de los visitantes nacionales y extranjeros.

A seguir esforzándose para brindar la atención profesional y la calidez en el trato, que es otra gran ventaja de México como destino turístico; y también a que disfruten las playas, a que promuevan entre las propias familias cancunenses, quintanarroenses, el disfrute de las playas, que son suyas, que son nuestras, que son de todos los mexicanos.

Les reitero que cuentan con todo el apoyo del Gobierno Federal para seguir proyectando a Cancún como el destino turístico más importante del país y uno de los mejores del mundo.

México está orgulloso de Cancún y orgulloso de todos ustedes.

Muchísimas felicidades, y que sea para el bien de Quintana Roo y de México, señor Gobernador.

Muchísimas gracias a todos.

BENITO JUÁREZ, Q. Roo

http://www.elpuntocritico.com


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