Para impulsar mayor transparencia en las organizaciones de la sociedad civil, la diputada Tomasa Vives Preciado (PAN) propondrá que las dependencias y las entidades de la administración pública federal difundan los lineamientos específicos para otorgar apoyos y estímulos, así como el listado de organizaciones que los reciben.
Mediante una iniciativa de reformas a la Ley Federal de Fomento a las Actividades Realizadas por Organizaciones de la Sociedad Civil, plantea la creación de una oficina de evaluación y monitoreo, al interior de la Comisión de Fomento a las Actividades de las Organizaciones de la Sociedad Civil, para garantizar que dichas organizaciones sean quienes definan los criterios de análisis de esos informes.
Indicó que en México y en todo el mundo las organizaciones de la sociedad civil han gozado niveles de confianza pública que superan los de cualquier otro sector de la sociedad, pero a partir del 2007 éstos bajaron, dada su débil rendición de cuentas, la omisión de los impactos logrados y su nulo vínculo con las prioridades sociales.
Vives Preciado refirió que en los países en desarrollo el nivel de confianza de dichas organizaciones es del 50 por ciento y ocupan el tercer lugar después de las empresas, con 60 por ciento, además de los medios de comunicación, con un 53 por ciento.
Por ello, se pronunció por tomar acciones que permitan rescatar uno de los elementos imprescindibles de una democracia: las organizaciones de la sociedad civil. “Ni dichas organizaciones ni ningún otro espacio de participación puede gozar de legitimidad y credibilidad si no recurren a la rendición de cuentas, que no es privativa del sector público y ha cobrado relevancia en los últimos años”.
Subrayó que informar con periodicidad a los ciudadanos sobre el estado que guarda el cumplimiento de misiones y objetivos es una tarea cotidiana y obligatoria, por lo que el Estado debe apoyar y consolidar este proceso, a través del establecimiento de reglas y mecanismos claros en el sistema legal, en el que se incentive a las organizaciones a garantizar la transparencia en sus acciones sobre todo cuando éstas se hacen con recursos públicos.
“Esto es fundamental para rescatar la credibilidad de este sector para no mermar y sí promover el ejercicio ciudadano; pero sobre todo garantizar que todo aquel ámbito en el que el Estado invierte sea un espacio con resultados palpables y que beneficien a la población”, afirmó.
La diputada recalcó que el objetivo de la iniciativa es garantizar la transparencia y la difusión del trabajo de las organizaciones de la sociedad civil, a fin de que la sociedad pueda verse beneficiada de sus experiencias y las lecciones aprendidas.
En México, recordó, mediante la Ley Federal de Fomento a las Actividades Realizadas por Organizaciones de la Sociedad Civil, se les obliga a informar anualmente a la comisión sobre las actividades que realizaron y el cumplimiento de sus propósitos, así como datos financieros, contables y patrimoniales para transparentar su funcionamiento.
“Si bien con ello se cuenta con un primer instrumento que permite conocer el funcionamiento de estas organizaciones, es necesario impulsar mecanismos de transparencia y rendición de cuentas”.
Con dichas reformas, abundó Tomasa Vives, se vigoriza la transparencia y rendición de cuentas, que fortalece el trabajo de la sociedad civil y genera mayores posibilidades de participación en un marco de certeza y eficiencia en la utilización de recursos públicos. México, D.F.
Mediante una iniciativa de reformas a la Ley Federal de Fomento a las Actividades Realizadas por Organizaciones de la Sociedad Civil, plantea la creación de una oficina de evaluación y monitoreo, al interior de la Comisión de Fomento a las Actividades de las Organizaciones de la Sociedad Civil, para garantizar que dichas organizaciones sean quienes definan los criterios de análisis de esos informes.
Indicó que en México y en todo el mundo las organizaciones de la sociedad civil han gozado niveles de confianza pública que superan los de cualquier otro sector de la sociedad, pero a partir del 2007 éstos bajaron, dada su débil rendición de cuentas, la omisión de los impactos logrados y su nulo vínculo con las prioridades sociales.
Vives Preciado refirió que en los países en desarrollo el nivel de confianza de dichas organizaciones es del 50 por ciento y ocupan el tercer lugar después de las empresas, con 60 por ciento, además de los medios de comunicación, con un 53 por ciento.
Por ello, se pronunció por tomar acciones que permitan rescatar uno de los elementos imprescindibles de una democracia: las organizaciones de la sociedad civil. “Ni dichas organizaciones ni ningún otro espacio de participación puede gozar de legitimidad y credibilidad si no recurren a la rendición de cuentas, que no es privativa del sector público y ha cobrado relevancia en los últimos años”.
Subrayó que informar con periodicidad a los ciudadanos sobre el estado que guarda el cumplimiento de misiones y objetivos es una tarea cotidiana y obligatoria, por lo que el Estado debe apoyar y consolidar este proceso, a través del establecimiento de reglas y mecanismos claros en el sistema legal, en el que se incentive a las organizaciones a garantizar la transparencia en sus acciones sobre todo cuando éstas se hacen con recursos públicos.
“Esto es fundamental para rescatar la credibilidad de este sector para no mermar y sí promover el ejercicio ciudadano; pero sobre todo garantizar que todo aquel ámbito en el que el Estado invierte sea un espacio con resultados palpables y que beneficien a la población”, afirmó.
La diputada recalcó que el objetivo de la iniciativa es garantizar la transparencia y la difusión del trabajo de las organizaciones de la sociedad civil, a fin de que la sociedad pueda verse beneficiada de sus experiencias y las lecciones aprendidas.
En México, recordó, mediante la Ley Federal de Fomento a las Actividades Realizadas por Organizaciones de la Sociedad Civil, se les obliga a informar anualmente a la comisión sobre las actividades que realizaron y el cumplimiento de sus propósitos, así como datos financieros, contables y patrimoniales para transparentar su funcionamiento.
“Si bien con ello se cuenta con un primer instrumento que permite conocer el funcionamiento de estas organizaciones, es necesario impulsar mecanismos de transparencia y rendición de cuentas”.
Con dichas reformas, abundó Tomasa Vives, se vigoriza la transparencia y rendición de cuentas, que fortalece el trabajo de la sociedad civil y genera mayores posibilidades de participación en un marco de certeza y eficiencia en la utilización de recursos públicos. México, D.F.
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